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Norberto Vidal: “Sin el soterramiento, los puentes y túneles dividen aún más las ciudades”

En las calles de Haedo, el segundo piso de “Vidal propiedades”, una gran mesa rectangular se convirtió en un debate entre viejos vecinos y un precandidato a intendente de Juntos por el Cambio.

Por: Valentina Moreno

En medio de la incertidumbre política y su porvenir hacia las elecciones de octubre, Norberto Vidal, su esposa, Estrella y Marcelo Vázquez, unidos por la vecindad de Haedo, debatieron el gran problema de la conectividad entre el norte y el sur del Partido de Morón. “En el caso del soterramiento, el desafío estuvo en hacerle ver a la comunidad que, si se desarrollaban los puentes y los túneles, las consecuencias las íbamos a vivir todos, no el vecino de la esquina”, afirmó Norberto Vidal, fundador de la inmobiliaria. Además, remarcó el desafío de hacer entender a la comunidad de Morón que era necesario involucrarse.

"Cuando al individuo no le afecta el problema, no se involucra. Total que lo resuelva el vecino", revelaba Norberto Vidal sobre la importancia del involucramiento de los vecinos en los asuntos del municipio. (Créditos: Valentina Moreno).

"Cuando al individuo no le afecta el problema, no se involucra. Total que lo resuelva el vecino", revelaba Norberto Vidal sobre la importancia del involucramiento de los vecinos en los asuntos del municipio. (Foto: Valentina Moreno).

La división entre el norte y el sur fue gran parte de tema de conversación, pero el foco siempre terminaba en la principal problemática del asunto: el ferrocarril. Leandro Ugartemendia, actual precandidato a intendente del Partido de Morón, remarcó que más allá de haber distinciones entre el norte y sur, la principal división se da por el ferrocarril y la cercanía de una arteria como la de Rivadavia. “Es la combinación de las dos cosas la que va haciendo el desarrollo, pero la que las fragmenta es siempre el ferrocarril”, reafirmó el precandidato de Juntos por el Cambio.

 

Durante el debate, Norberto Vidal trasladó a los presentes a un viaje en el tiempo unos diecisiete años atrás hacia los comienzos de la propuesta de los puentes y túneles en tiempos de la intendencia de Martín Sabbatella. “En ese momento estaba un proyecto de un montón de puentes que destruían las áreas comerciales de Ramos Mejía, Morón y Haedo”, comentaba Vidal algo enojado. Continuó narrando la odisea de reclamos y audiencias por las que pasaron los vecinos hasta lograr revertir ese proyecto.

"Hicimos una reunión en la UFC donde vinieron 500 personas y fue una derrota total hacia el proyecto que planteaban" comentaba Norberto Vidal sobre su lucha en contra del proyecto de los puentes. (Foto: Valentina Moreno).

“Los reunimos a todos y ahí surgió un gran movimiento hasta llegar al recurso de amparo. Hablamos con todas las autoridades: municipales, sociedades de fomento, para decirles nuestro proyecto, que tenía que ser el soterramiento”, sostenía Vidal mientras explayaba su lucha por el bien de la comunidad de vecinos. A su vez, remarcó la gravedad del proyecto planteado: “Se iban a sacar 35 pasos a niveles y, en su lugar, colocar 19 túneles y puentes con el riesgo de la creciente inseguridad que ya se avecinaba”.

Acerca de los puentes, Norberto expresó su preocupación acerca de la desinformación del proyecto que se quiere llevar a cabo en la actualidad. “Yo quisiera hablar con el proyectista porque es un disparate”, remarcó el vecino explicando que el proyecto plantea una construcción de puentes angostos, con curvas de casi 90º y cuyas bases ocupan la Avenida Rivadavia.

 

A medida que pasaban los minutos, las papas comenzaban a arder entre uno de los vecinos presentes, Marcelo y Ugartemendia. Sin embargo, ambos reconocieron que las equivocaciones políticas salen a la luz cuando se inician proyectos detrás de un escritorio, sin consultar a nadie. Y entre algunos comentarios, retornó el problema político en relación a la división del partido. “Yo me acuerdo de empezar a redactar afiches y pegarlos en las plazas a las tres de la mañana donde se encontraban delincuentes y drogadictos, pero seguimos adelante”, recordaba Vidal. “Con las audiencias públicas que le pedíamos al Estado y ayudados por algunos periodistas locales, logramos hacer visible nuestro reclamo en contra del proyecto”, insistía el vecino.

 

Sin embargo, la unificación norte y sur del partido parece algo casi inviable en la mente de Vidal: “Yo, verdaderamente, no veo una solución al problema de la conectividad, por lo menos, hasta que no esté una obra como el soterramiento”. Así también, el constante rechazo a los puentes llegó a ser un punto a remarcar. Sobre las alternativas existentes como puentes y túneles, Norberto Vidal explicó: "son un retroceso porque quitan el flujo del tránsito y también sacan las barreras de funcionamiento”. 

 

Entonces, ¿es el soterramiento o nada? Norberto Vidal nos comentó que el problema mayor es la fluidez del tráfico el cual quieren tapar con un parche: los puentes. Por lo tanto, la única solución es el soterramiento o la infraestructura aérea como en el resto del mundo. Él señaló que lo ideal sería la primera opción ya que se aprovecharía la parte superior para parquizar, para centros comerciales y para una conectividad norte sur en las esquinas. Por eso, Vidal es uno de los vecinos que no baja los brazos y continúa con los reclamos para el bien de todos.

 

Una vez que parecía haber cesado la mesa de debate en la calle Rivadavia al 16101, un nuevo integrante se sumó a la conversación. Adrián Vidal, el hijo de Norberto y actual rematero de la inmobiliaria, aportó a los presentes información sobre los alquileres en la actualidad del Oeste. “Está claro que es una complejidad que el tren divida a la zonas”, confirmaba el hijo de Norberto Vidal, mientras explicaba que por sí los alquileres habían disminuido debido a la modificación de la Ley de Alquileres de dos años a años obligatorios de alquiler. “Hay gente que capaz vive del lado sur y nos pide una propiedad del lado norte porque tiene que llevar a los chicos al colegio del otro lado y el túnel genera tráfico debido a las barreras cerradas”, concluyó Vidal hijo remarcando el problema troncal de Morón: la fluidez del tránsito.

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